¿Cuántas veces has dedicado horas y horas a la limpieza y al acabar parece que apenas has limpiado? Pues eso puede acabar si sigues esta premisa: el orden hace la efectividad.
Con orden y planificación puedes hacer una limpieza más rápida y efectiva. En este caso, desde Monra’s te proponemos dejar tu cocina como nueva en 1 hora.
Para que no tardes más de una hora en limpiar tu cocina, sólo necesitas planificar el orden de las tareas a realizar, preparar los productos de limpieza que vayas a necesitar y aprovechar sus tiempos de actuación de esos productos para limpiar las diferentes superficies. Lee las etiquetas de los productos para saber qué orden debes seguir según su tiempo de actuación.
Si sigues este plan, la cocina te quedará reluciente y no tardarás más de lo necesario.
Trucos con los que ganar tiempo
- Prepara 2 cubos de agua y varias bayetas. Añade al agua 2 o 3 tapones de amoniaco. En uno de los cubos humedece las bayetas con las que limpiarás, y en el otro las dejas una vez que las hayas utilizado. De esta manera no las lavas según vas acabando de usarlas, sino que las lavas todas cuando hayas acabado de limpiar.
- Protege la zona de cocción con una trasera. Así evitarás que la grasa se meta en las juntas de los azulejos.
- Protege la placa o vitrocerámica con una lámina protectora. Así evitarás que se ensucie mientras preparas la comida.
Errores que has de evitar para no retrasarte
- Empezar a limpiar por la placa o vitrocerámica. Al limpiar la campana, volverá a mancharse la placa, por lo que rocía la superficie con el producto limpiador correspondiente para que pueda empezar a actuar, y céntrate en la campana.
- No dejar que los productos actúen durante el tiempo que requieren. Si no respetas los tiempos de actuación, los resultados nos serán los deseados y no quedará más remedio que volver a empezar.
- Echar más producto del necesario. No por utilizar más producto vas a limpiar más o mejor. Sólo formarás más capa o espuma y te costará más limpiar la superficie. Además estarás malgastando producto.
- Pon papel de cocina debajo de las aceiteras y vinagreras. Así recogerás lo que gotea y no manchará el armario. Además cuando esté muy sucio sólo hay que tirarlo a la basura y colocar otro nuevo.
- Pasa una bayeta a la campana después de cada uso. Usa una bayeta húmeda con unas gotas de amoniaco para limpiar la campana después de cocinar y así no acumularás tanta grasa.
Pasos a seguir para una limpieza más eficiente en la cocina:
- Horno, microondas y campana: 10 minutos
Debes empezar por ellos porque son los que más grasa acumulan. Este es el orden más recomendable para limpiarlos:
- Empieza por darle producto antigrasa al horno y déjalo actuar durante unos 3 o 4 minutos.
- Mientras, coloca en el microondas un cuenco con agua y limón durante unos 3 minutos.
- Lava el plato del microondas
- Ahora pasa una bayeta o esponja humedecida en agua y amoniaco por la campana, con cuidado de no mojar el motor. Si las rejillas están muy sucias, retíralas y rocíalas con el mismo producto que al horno y déjalo actuar.
- Después, lava el plato del microondas.
- Luego, seca la campana y el microondas.
- Pasa una bayeta húmeda al horno y a las rejillas (si las retiraste para limpiarlas).
- Ahora seca bien el horno y las rejillas.
- Ya está, ¡primera fase lista!
- Frente superior: 15 minutos
Es importante limpiar de arriba abajo para que no se ensucie lo que ya has limpiado. El orden que deberías seguir en esta fase es el siguiente:
- Primero rocía o reparte el producto limpiador de vitrocerámica para que actúe. Si lo que tienes es placa de gas, rocía desengrasante y déjalo actuar unos 5 minutos mientras colocas los quemadores en un recipiente con agua y unas gotas de amoniaco.
- Empezando por la zona donde cocinas, limpia los azulejos de la pared con una bayeta humedecida en agua y amoniaco, y luego seca todo bien con un trapo.
- Haz lo mismo para limpiar los armarios altos, los perfiles de la ventana y la zona superior de la nevera.
- Para limpiar los cristales, usa un paño humedecido en agua y unas gotas de alcohol, y luego sécalos con otro paño seco, pero que no deje pelusa.
- Placa o vitrocerámica y encimera: 10 minutos
- Como en la fase anterior ya le habíamos rociado el producto a la placa o vitrocerámica, ahora toca retirarlo con una bayeta húmeda.
- Si ha quedado algún resto de suciedad en la vitrocerámica, pasa la rasqueta para retirarla.
- Seca bien la superficie con otra bayeta, y en el caso de la placa, seca y coloca los quemadores también.
- Ahora pasa una bayeta húmeda con un poco de detergente neutro y después sécala con un paño.
- Zona inferior y cubo de basura: 10 minutos
- En primer lugar, llena el cubo de basura con agua templada y unas gotas de lejía para desinfectarlo.
- Mientras la lejía actúa, limpia los muebles bajos y la parte inferior de la nevera con una bayeta humedecida en agua y amoniaco.
- Seca bien los muebles y la nevera con otro paño.
- Ahora friega el cubo de basura con detergente y déjalo secar al aire.
- Fregadero y suelo: 15 minutos
- Primero lava en el fregadero todas las bayetas que has usado para limpiar la cocina.
- Ahora limpia el fregadero y el grifo con una esponja y un poco de detergente neutro.
- Después sécalos bien.
- Aspira el suelo para eliminar todo resto de suciedad y polvo que quede en el suelo, así al fregarlo no repartirás la suciedad por la cocina.
- Friega el suelo con agua templada y un par de tapones de amoniaco.
Verás que si sigues nuestras recomendaciones tu cocina quedará perfecta en menos tiempo del que solías dedicar, y así podrás aprovechar ese tiempo extra para hacer lo que más te gusta, dedicarte tiempo a ti mismo/a o disfrutar de los tuyos.
¿Cómo limpias tu cocina? ¿Cuánto sueles tardar? ¿Conocías estas recomendaciones? ¿Añadirías alguna más? ¡Cuéntanoslo!